Perfil
Como bien lo decía Sabines, pon una hoja tierna de luna bajo tu almohada y mirarás lo que quieras ver, pues no hay mejor estimulante para los presos, desencantados, los condenados a muerte y los condenados a la vida que la luna en dosis precisas y controladas.
La luna ha sido desde siempre uno de los conceptos favoritos de Diana, tal vez por que su signo astral esta representado por ella, obviamente es cáncer, nació un 27 de junio y casualmente lleva el nombre de la diosa romana de la luna, le encanta mirar la noche y observar ese astro luminoso que encandila cualquier mirada, quizá por ello le encanta el color negro, porque le recuerda a la noche.
Ha sido adicta a las poesías desde la niñez, siempre le ha encantado mirar como los poetas pueden describir o relatar algo con tanta belleza, saber como Sor Juana Inés de la Cruz, su poetiza favorita, siendo monja pudo plasmar en palabras las formas más comunes del amor con las que todos podemos identificamos, quizá por ello le gusta escribir, porque piensa que tal vez algún día podrá transmitir su sentir de la manera tan extraordinaria como lo hacen sus poetas favoritos.
No es de extrañarse que uno de sus autores predilectos sea William Shakespeare, quien mejor que él para describir un escenario, una plática o una muerte tan apasionada como la de Julieta y su Romeo, Diana puede imaginarlo todo en su cabeza aunque ella viva a miles, cientos o millones de kilómetros de la bella Verona.
Diana vive en Jardines de Morelos una colonia ubicada en Ecatepec el municipio más grande de México y de gran parte de América Latina, ella ha vivido allí los veintidós años de su vida ha mirado el ir y venir de la gente y a observado como su colonia se ha ido llenando de casas, comercios y plazas.
Aun recuerda sus años de secundaria cuando como toda adolescente le encantaba escuchar las canciones de Jeans, Mercurio, Kaba y claro los Backstreetboys, todas esas poperias que hasta la fecha le siguen trayendo muy buenos recuerdos.
Los años de prepa fueron otra historia, muy alegres y tontos como los de la mayoría, allí conoció a Green Day y al Punk, a SKAPE y su música irreverente la cual por supuesto le encantó pero sobre todo conoció o mejor dicho reafirmó a un personaje que la ha inspirado toda la vida, Ernesto Guevara de la Serna, mejor conocido como el “che” Guevara, para ella no hay otro personaje que represente mejor un espíritu revolucionario que él, nunca conoció a alguien tan despegado de todo interés, aquel que había dado su vida tratando de dar libertad a los demás y sobre todo aquel que luchó por la igualdad y que sabía que ser pobre no debe ser sinónimo de ignorante.
Decidió pintar sus ojos de negro, en primera porque le encantaba el color y también porque fue su manera de simpatizar con ese movimiento que había surgido en Francia 1860 como una manifestación por parte de estudiantes y obreros que le reclamaban a la sociedad el tenerlos muertos en vida, le pareció una manera interesante de expresarce, pero eso nunca significo que estuviera cerrada a las demás ideas, siempre le ha gustado tomar las cosas buenas de cada cultura y movimiento como la danza, siempre le encanto la manera tan estética en que el cuerpo suele desenvolverse al compás de una melodía dando esa sensación de libertad, logro satisfacer su curiosidad a través del Jazz el cual estudio por cuatro años hasta que el dinero y el tiempo comenzaron a escasear, pero esa no fue la única experiencia que había tenido con la danza, el calpulli al que la invito su maestro le brindo la oportunidad no solo de poder aprender danzas tan ancestrales como la del tigre y el apache, sino también el poder entenderlas y valorarlas así como toda la tradición oral que encierra nuestra cultura, fue un viaje interesante lleno de aventuras, como su primer temazcal, en donde no pensó salir viva entre la asfixia y el bochorno.
Para ella las etiquetas sociales son meramente innecesarias, para que pintar tu ser de un solo color cuando puedes ser una mezcla multicolor, además quien puede decirse dueño de una ideología cuando sabemos que estas nacen de cientos de pensamientos, por eso a ella le gusta ser como es o al menos eso intenta ya que aveces es difícil resistirse a la fácil adaptación, pero en general no le interesa seguir las modas complejas tal vez porque piensa en parte que no le van muy bien, por ello sus jeans son sus mejores aliados siempre intemporales y sobre todo cómodos, los colores sobrios siempre le han caído bien quizá por su versatilidad, aunque de vez en cuando le gusta poner una nota de color a su vestuario, los tacones siempre han sido sus compañeros, tal vez porque son quienes le han ayudado a cobrar unos centímetros más de estatura, aunque no sirva de mucho cuanto todos te llaman de cariño chaparrita.
Otro de los temas que le apasionado es la lucha revolucionaria, tal vez por que nació dentro de una familia guerrerense de corazón y sangre que miró con propios ojos y luchó junto a Lucio Cabañas en la guerrilla de la sierra de Guerrero. Por ello tal vez deseaba con tanto fervor poder estudiar en la UNAM, nuestra universidad que siempre ha sido vista como semillero de ideas y revoluciones y un escenario libre para el arte, pero como bien se sabe no todo en la vida puede ser perfecto y ese deseo simplemente se esfumó, pero como dicen no hay mal que por bien no venga, Diana tuvo que estudiar en otra escuela, la cual sólo tenía en común con la UNAM la U y la N del nombre, la UNE, Universidad de Ecatepec, su renuencia era grande, pero pronto se dio cuanta de que no sería tan malo, pues como bien se lo dijo su madre siempre “el que es perico donde quiera es verde” y el resto todos lo saben.
Diana estudió Ciencias de la Comunicación, a ella le encantaba el periodismo desde siempre, todo el tiempo supo lo que quería ser, y sabía que lo haría como fuera y donde fuera, su padrino le enseñó el amor por esta profesión, era un periodista de esos que en estos tiempos ya quedan muy pocos, comprometido con su trabajo y que siempre lo intentó utilizar como medio de expresión de esas voces que muchas veces no son escuchadas, quien decía “nosotros no somos prioridad, la prioridad es la gente que confía en nuestra labor”.
Los años dentro de la universidad le enseñaron muchas cosas, que siempre conocerás sea donde sea gente fuerte e inteligente, grandes amigos que te harán reír y con los cuales compartirás sueños y metas, también comprendió que la vida real y las notas de tus cuadernos tienen un abismo espantosamente grande, pues mientras en su clase le enseñaban que la libertad de expresión es un derecho que todos tenemos y que esta establecido dentro de nuestra constitución, se enteraba a la vez que su padrino había sido secuestrado posiblemente a causa de esa libertad de expresión.
El mirar los noticiarios le desencantó un poco, pues se dio cuenta de que muchas veces el periodismo o los medios de comunicación se usan como armas que sirven para salvaguardar intereses políticos y económicos. Es duro toparse con la verdad y más cuando sea creído toda la vida en algo, pero Diana sabe que aunque es duro el panorama siempre habrá algo que hacer por insignificante que parezca.
Como aquella vez en que tuvo la oportunidad de visitar la montaña Amuzga que entre la miseria y la ignorancia la ha llevado a ser uno de los lugares con mayor número de infectados por el VIH, pero a pesar de ello la esperanza de la gente y sus ganas de aprender persistían, Radio Nomndaa era un claro ejemplo, era la radio difusora clandestina del pueblo, construida humildemente con cartones de huevo que pretendían aislar el sonido, allí los amuzgos sin educación ni grandes escuelas aprendieron a comunicarse mejor que muchos de los comunicadores, no solo enfrentándose a la difícil tarea de crear conciencia, sino también teniendo que aprender un idioma diferente.
Allí comprendió que los cambios no están hechos de grandes esfuerzos si no de pequeños pero siempre constantes y ahora esta en el Faro del Viento en donde sabe que conocerá a grandes personas y podrá aprender algo más pero sobre todo que podrá transmitir a los demás algo de lo poco que ha aprendido en esta vida y sabe que así será hasta que le queden fuerzas y esperanzas.
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