Periodismo Comunitario

Diana Ramos


Los ecos del pasado retumban en el presente, el sonido del huehuetl despierta los sentidos regalados por la tierra.
El viento rodea el lugar y el olor a copal tiñe de mistisismo el ambiente, cuando las manecillas del reloj marcan las nueve en punto el sonido de los caracoles invocan a Tonanzin.
La tierra árida, quebradiza y polvorienta forma la niebla hecha polvo que se esparce en todo el llano, mientras la silueta del jaguar se vislumbra poco a poco.
Las voces unisonas y graves se convierten en cantos dirigidos a la tierra, los cuatro rumbos han dado su aprobación y la Cuatlicue equilibra las almas.
El primer toque de huehuetl provoca un sonido grave y prolongado que se convierte en silencio.
Los danzantes con sus trajes negros forman un circulo y la banda roja que ciñe sus cabezas atrae la energia a sus cuerpos que soportan los embates de Tonatiu Dios del sol, que cobra bruscamente cada ofrenda.
Todo se encuentra en su lugar, al centro los escudos del calpulli resguardan las fugurillas de barro, los craneos y conchas de mar que componen las ofrendas de los danzantes y alrrededor los guerreros de la lluvia inician la danza ancestral.
Sus pies descalzos se estrellan contra en suelo árido una y otra vez, y las grietas en sus plantas se llenan de sudor y sangre, los euforicos pasos de la danza los hace continuar al sonido de quiahui mexica, las frentes sudorosas muestran piel enrrojecida que aun siendo obscura sede ante los fuertes rayos del sol.
Las piruetas, patadas y saltos se unen al ritmo del huehuetl, los danzantes se turnan para interpretar, el jaguar, el apache, diversas y variadas formas de ofrenda unidas por la danza.
Las mujeres igualan a los hombres y resisten fuertemente la labor aunque casi las lleve al borde del desmayo, tan sólo unos minutos bastan para recobrar el aliento y reincorporarse a la danza.
La convivencia entre música y danza continua durante horas hasta que el último golpe del huehuetl hace surgir nuevamente el silencio, el ometeotl se ha logrado, todo está en equilibrio y los danzantes agradecen nuevamente a los creadores de la danza.
Los calpullis han existido en México desde el año 1300, la civilización azteca los utilizaba para formar las clasificaciones de los barrios dentro de determinado territorio, los integrantes de estos grupos tenian asignadas labores distintas que iban desde la agricultura, hasta las artesanias.
Con el correr del tiempo las culturas prehispaniacas de nuestro país se han convertido en registro historico de la diversidad y riqueza de nuestra cultura, pero actualmente los calpullis han logrado tracender esa linea historica para establecerce como recordatorio practico de ello.
Juan Carlos Álvarez Ruíz con apenas veinticinco años se ha convertido en maestro y guía de una cultura tan grande y ancestral como es la azteca. A los catorce años se dio su encuentro con el calpulli que le mostro un mundo lleno de misterio y sabiduría en el cual se ha desempeñado desde hace ya diez años.
Durante esos diez años ¿cúales son los rangos que ha desempeñado?
“Bueno mi siembra que es como se le llama porque se hace alución al nacimiento de un nuevo guerrero, es Temazkatltekatl que significa guardian o señor de los temazcales”.
¿Y cual es la función que desempeña dentro del calpulli?
“Yo tengo la labor de maestro, enseño que son los temazcales, como se hacen, filosofía nahuatl y calendario azteca”.
Juan Carlos explica que el significado de calpulli es casa de la danza o lugar de danza, por lo cual una de las principales actividades que se realizan en el es la danza.
¿Y de qué manera se determina cuando se realiza una danza?
“Se hacen cada ocho días esas son las reglamentarias, pero también hay otras que se establecen según las festividades del calendario azteca como la danza a la lluvia o a la tierra y cuando son veintenas se hacen dos danzas, una por la mañana y otra por la tarde”.
¿y cúal es el orden o la división que se le da a la danza?
“La danza se divide en cuatro fuerzas que son Quetzalcoatl, Tezcatlipoca que es la conciencia o excelencia, Kamachtlotl que es el instinto, HuIzilopoztli el guerrero”.

El nombre de los cuatro rumbos hace alución a los cuatro puntos cardinales a los cuales los danzantes rinden tributo y piden permiso antes de cada danza por medio de los caracoles que hacen sonar mirando a cada uno de los rumbos, los caracoles son tocados por hombres ya que según las creencias aztecas estos tienen escencia femenina y al ser tocados por un hombre crean una dualidad.
Los elementos que se utilizan dentro de la danza son el huehuetl que es el tambor con el cual se interpreta la danza y tambien es tocado por los hombres por considerarse un trabajo sumamente pesado, una de las labores designadas a las mujeres es el cuidado del fuego, ya que se les asocia con el por utilizarlo en las diversas actividades del hogar como lo es la preparación de los alimentos.
Pero la danza no es la unica actividad que se realiza en un calpulli, la meditación es otra de ellas así como las artes marciales a las que ellos nombran yahuyisketl y estas consisten principalmete en despertar los sentidos que tenemos escondidos .
“Un ejemplo es cuando vendamos los ojos al participante y tiene que presentir de donde viene el golpe”
El manejo del topil que es un tipo baculo y el chimal un escudo es otra de las actividades.
Las artes plasticas es otra de las actividades ya que la fabricación de artesanias es parte de nuestra cultura y una de las figuras más representativas son los llamados alebriges personages amorfos que según los aztecas consideraban como guardianes de los sueños.
Y un aspecto más es la enseñanza de la filosofía azteca y su historia por medio de la cual se logra preservar la enseñanzas de nuestros antepasados narradas por ellos mismos y pasadas de generación en generación.
¿Cúal es el nombre del calpulli en que participas?
Yautechamh xitonkianto que significa los guerreros de la lluvia
¿Cúantos años lleva de existir este grupo?
Apenas seis años
Anteriormente Juan Carlos había participado en el calpulli Youqueahuill que significa guerreros de lluvia, durante cuatro años, en el aprendio la mayoria de las actividades que ahora transmite a sus alumnos.
Para jóvenes como Juan Carlos la historia no sólo ha sido una materia más sino que se ha convertido en parte de su vida y de su manera de actuar y vivir, los calpullis más alla de ser registro historicos se han convertido en opción para muchos jóvenes que ven en el la manera de expresarse y crear.